Las pensiones ‘deben’ bajar casi 400 euros en 2021 para sostener el Sistema
- Los expertos aprecian peor salud financiera de la Seguridad Social tras el Covid
- El ‘piloto automático’ del IRP aplicaría una rebaja del 2,36%
- Revalorizar las pagas con el IPC elevará su coste en 36.000 millones en treinta años
Gonzalo Velarde.- ElEconomista.es
El Gobierno de Pedro Sánchez ya confirmó en el proyecto de Presupuestos Generales de 2021 que las pensiones subirán el 0,9% el próximo año. Ello añadirá, tal y como adelantó este medio, unos 1.400 millones de euros de coste adicional a la ya abultada partida presupuestaria para prestaciones de la Seguridad Social que rondará en el próximo ejercicio los 143.000 millones de euros, cerca de 11 puntos del PIB y un 3% más de lo destinado este mismo año. Lo que llevará al Sistema a acumular un déficit del 2% del PIB en 2021. Con esta premisa, según los expertos actuariales de la consultora Willis Towers Watson, garantizar la viabilidad económica del sistema público de pensiones, para cerrar el déficit, obligaría al Gobierno a llevar a cabo una reducción del gasto del 2,36%, es decir, unos 400 euros (386 euros) en la nómina anual de un jubilado medio y unos 336 euros para el pensionista medio español.
Si bien se trata de un ejercicio prospectivo que emana de lo que sería la aplicación del conocido como índice de Revalorización de las Pensiones (IRP) impuesto en la reforma del Sistema llevada a cabo en 2013 por el PP, pero sin tener en cuenta el suelo de revalorización que se fijó del 0,25%, el dato si que da cuenta de un empeoramiento de la salud financiera de la Seguridad Social en el último año ya que la fórmula fija el recorte necesario en el gasto para equilibrar el Sistema.
Así, el cálculo realizado por el Observatorio de Pensiones de Willis Towers Watson, en colaboración con la Universidad de Valencia y la Universidad de Extremadura, con la información que proporciona la ejecución presupuestaria de la Seguridad Social tras el tercer trimestre de 2020, está lejos de ser alentador: se estima que se sitúe en el -2,36%, frente al de 2020, que se situó en un -1,65%. Como señala Javier González Gugel, director de Desarrollo de Negocio de Retirement de Willis Towers Watson, “El análisis de este valor adelantado del IRP para 2021 tras la ejecución presupuestaria del tercer trimestre de 2020 muestra un notable empeoramiento de la situación financiera del sistema de pensiones español, rompiendo la tendencia de los 2 años anteriores”.
Nuevo paradigma
No en vano, toda esta predicción sobre la salud del Sistema ligada al resultado del IRP parece tener fecha de caducidad ya que la vinculación de las revalorizaciones próximas vinculadas a la inflación quedarán atadas por ley una vez que el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, realice los cambios pertinentes en la ley de Seguridad Social a partir de las recomendaciones para la reforma acordadas y aprobadas recientemente en el Pacto de Toledo y convalidadas en el Congreso.
Cabe recordar en este punto, tal y como ha señalado recurrentemente Fedea que en una situación de crecimiento ordinario de la economía y avances medios de la inflación del 2% el coste de la partida se incrementaría cada año unos 2.500 millones de euros. Esta senda, según advierte el Banco de España en sus previsiones a medio plazo para la economía española supondrá que la Seguridad Social gastará en 2050 unos 36.000 millones de euros más en esta partida.