EL CONCEPTO DE ASERTIVIDAD
La asertividad es una habilidad que te permite expresar sentimientos, opiniones, necesidades y pensamientos, en el momento oportuno, de la forma adecuada y sin negar ni desconsiderar los derechos de los demás.
Es el equilibrio y se sitúa entre el comportamiento agresivo y el pasivo.
Características del comportamiento asertivo:
- Expresión clara y directa de los derechos propios.
- Escucha activa del interlocutor.
- No lleva a cabo adivinaciones de los pensamientos de los demás.
- No juzga, no culpa, no acusa, no amenaza.
- No depende de la aprobación de los otros.
- Busca soluciones alternativas y su momento adecuado.
- Respeta pensamientos y sentimientos de los demás.
- Controla las emociones personales (mediante respiración, autoinstrucciones, consciencia…)
- Exige el respeto, que no el afecto, del otro.
- Mantiene la regla del oro en la comunicación:
- Lograr objetivos.
- Mantener y mejorar las relaciones.
- Minimizar los costes emocionales.
Para ser asertivo es necesario tener equilibrio emocional y una personalidad madura, y se precisa de perseverancia para aprender a serlo. A cambio, se consigue:
- Mejor autocontrol.
- Eliminar los sentimientos de ansiedad y de culpa.
- Mayor satisfacción y confianza en uno mismo.
- Sentirse mejor, aun cuando no se consigan todos los objetivos.
- Relaciones más íntimas y significativas.
- Ser más feliz.
¿No te gustaría ser así? ¿No te gustaría sentirte así?